Es el amor sin duda.
El amor por la naturaleza, por los colores marchitos del otoño, por los ciclos de la vida. El amor por la familia, por los amigos, por la gente, por los seres vivos.
Y por todo ello. O por nada. Cada uno con su amor particular, a su manera. Para ser motivo de levantarse cada día, y para salir de la cama en este sábado de clima adverso.
Y si nada nos libra de la muerte,
al menos que el amor nos salve de la vida.
(Javier Velaza)
al menos que el amor nos salve de la vida.
(Javier Velaza)
Y más en estos tiempos, en estas semanas tristes donde parecen triunfar el odio, las barreras y la intolerancia.
Y ante el odio, sólo nos queda amar la vida...
Y no se nos ocurre mejor forma de hacerlo que juntarnos, gente de aquí y de allá, a caminar y a conversar, como viejos amigos, en otro sábado más por los caminos y montes de Asturias.
En esta excursión nos adentramos por el conceyu de Aller, a través del puerto de San Isidro, para contemplar el hayedo del Gumial.
Hayedo del Gumial |
El otoño tiene un poso de melancolía. Será la luz tenue, será que la vitalidad se toma un respiro hasta la primavera, o quizás es la vuelta al cole (y a las fastidiosas obligaciones).
Pero nos ofrece una gama de tonalidades espectaculares en el bosque asturiano.
Y no hay bosque más mágico que el fayéu en otoño, con la rectitud blanquecina de los esbeltos troncos del haya contrastando con los intensos colores de sus hojas en esta época.
Andarina, vienes tarde,
andarina, vienes tarde,
vistida de sol y orbayu,
traes oro y plata traes
a los fayeos de mayo.
Vamos a realizar la ruta PR-AS 48, que desde el Fielato (casi en el alto del puerto), nos conduce a Cuevas.
Ruta PR-AS 48, bordeando la peña Cotelbu |
El Excmo. Ayuntamiento de Aller nos ofrece una descripción detallada de la ruta en su web:
El itinerario comienza en El Fielato, un conjunto de cabañas situadas en el Puerto Braña, en el margen derecho de la carretera AS-253. Desde aquí nos dirigimos hacia el cauce del río Braña, que cruzaremos siguiendo las señales del sendero, e iniciamos una leve subida que nos lleva a Brañarreonda. En este lugar encontramos una fuente, desde la cual parte el sendero que nos conduce en ascenso a la Collá Beldoso. El camino prosigue escorándose a la izquierda de la collada, pasando sobre el bosque de hayas centenarias conocido como Monte'l Tuzu. El paso por un piornal y un pedrero nos conduce a la majada de Fuentes de Baxo y a la recóndita braña de El Gumial. Tras pasar este último punto, pronto nos encontramos sumergidos en el bosque que da nombre a la ruta: El Gumial. Un bosque de hayas con un encanto especial, en el que no es difícil imaginarse la existencia de seres mitológicos, siempre acompañados por el rumor del agua del río Alba. A partir de aquí, descendemos continuadamente por una pista dejando a nuestro paso el agrupamiento de cabañas denominado La Yana. Pronto llegamos al fondo del valle por el que discurre el río Braña, que tendremos que cruzar para coger el camino que baja paralelo a la carretera hasta llegar a Cuevas, punto final del itinerario.
En el Monte'l Tuzu disfrutamos la primera nieve de la temporada ¡parece azúcar glaseado! |
Braña del Gumial |
Qué sería de este Grupo si no apreciásemos la lluvia en toda su magnitud. En el collado, la ligera y preciosa nieve que cae se va convirtiendo, en la parte final de la excursión, en un chaparrón que hace innecesario ducharse en casa. Así que nos cambiamos en un cobertizo agitados por la brisa otoñal (¡qué calor!). Y a comer y tomar un orujo al Mesón de Cuevas.
Nuestros mejores deseos para Camilo, para que se recupere y vuelva cuanto antes, y mil gracias para los fotógrafos del día, Aída y Calixto.
Nos vemos en la siguiente...
La galería completa de fotos en flickr.
Descargar ruta en formato GPX